Desde hace más de 100 años, es muy común escuchar hablar de las causas de la hipocondría. En el área de la salud, se considera que el aspecto psicológico juega un papel fundamental para comprender la naturaleza de este tipo de padecimiento. La Organización Mundial de la Salud (OMS) denomina a la hipocondriasis como un trastorno de carácter somatomorfo. Es decir, síntomas somáticos condicionados por preocupaciones y niveles desproporcionados de angustia. Por lo tanto, la persona que experimenta esta condición estará constantemente obsesionada con las enfermedades y la propensión a contraerlas.
Las causas de la hipocondría tienen un origen multifactorial, pero tienen un común denominador que se basa en la experiencia personal y creencias. En este sentido, es importante destacar los componentes que caracterizan este trastorno (cognitivo, emocional-fisiológico y conductual). Generalmente, a la hipocondriasis se le relaciona con síndromes psiquiátricos, específicamente, con la ansiedad y el trastorno del estado de ánimo. En este sentido, resulta significativo conocer cuál es su origen y la sintomatología para poder ayudar a canalizar este trastorno que es capaz de afectar la dinámica social, profesional y familiar de una persona. Sigue leyendo.
Causas de la hipocondría: detalles de su origen y cómo mejorar
Es muy común que cuando se hace referencia a las causas de la hipocondría, las personas la relacionan con el origen de las obsesiones y sus consecuencias. Sin embargo, es un tema mucho más profundo. La persona puede llegar a concebir rasgos propios de una patología psíquica. Es decir, aunque se realice exámenes para determinar el motivo de sus dolencias y estos resulten negativos, no cederá. Seguirá indicando que padece una determinada enfermedad a pesar de que se le indique que se encuentra bien. Esto, a largo plazo, puede desembocar en el desarrollo del trastorno delirante somático, lo que empeorará su condición.
¿Cuáles son las causas de la hipocondría?
Actualmente, la mayoría de las investigaciones ubican las causas de la hipocondría es estos tres aspectos. Primero, por herencia familiar. Es decir, el individuo se formó en un hogar en el que algún miembro influyente de la familia, mostraba, constantemente, preocupaciones excesivas por su salud y la de los demás. La segunda causa está vinculada a las experiencias traumáticas de vida. Por ejemplo, cuando la persona es sobreviviente de un accidente o enfermedad grave. También, cuando fue testigo cercano del padecimiento similar de su pareja, hijos, padres, etc. La tercera causa tiene que ver con las creencias que le hacen interpretar de manera catastrófica cualquier síntoma menor en su cuerpo.
Existen otros aspectos que son señalados como causas de la hipocondría y que vale la pena resaltar. Uno de ellos son los antecedentes de abuso sexual durante los primeros años de vida. Esta experiencia puede llegar a ser tan traumática que la hipocondriasis puede llegar a ser una de las secuelas psicológicas. También, la tendencia a desarrollar una enfermedad por genética familiar. Es decir, si hay casos de hipertensión en la familia, creer que ya padece los síntomas, aunque no existan indicios objetivos.
Respecto a la hipocondriasis, existen factores de riesgo que son determinantes. Por ejemplo, todo aquello que le produzca ansiedad a la persona es un estímulo significativo que conlleva a experimentar dolencias que no existen o a creer que se está enfermo sin estarlo. En este sentido, los niveles altos de estrés es un factor al que están expuestos constantemente y del que deben tener mayor precaución. Asimismo, la tendencia a buscar las respuestas a los estados de su salud en internet y dar validez a la información encontrada de manera expedita.
Los síntomas más significativos de una persona con hipocondría
Las conductas con rasgos obsesivos es un síntoma infalible que denota la presencia de este trastorno en una persona. Sin embargo, no es el único. El individuo hipocondríaco es proclive a los pensamientos negativos, generalmente, catastrofistas. Además, tiende a la rumiación y al perfeccionismo. Cualquier dolencia, por muy pequeña que sea, la considerará un signo derivado de un padecimiento mayor. Es posible que el sujeto recurra a todo tipo de métodos para vigilar las funciones fisiológicas de su cuerpo, constantemente.
Prevenir la hipocondría
A pesar de que en tu historia de vida se evidencien las causas de la hipocondría, puedes evitar caer en el círculo obsesivo del trastorno. Lo primordial es recurrir al apoyo de un profesional. De esta manera, tendrás más herramientas a la hora de afrontar los síntomas. Asimismo, procura reconocer las sensaciones y emociones que experimentas en momentos de estrés y preocupaciones. Encuentra las estrategias para tener un estilo de vida más saludable, que sean factibles para tu dinámica diaria.
La vida está llena de múltiples retos que hay que afrontar para poder avanzar y lograr la calidad de vida deseada. Nuestra salud mental es clave para mantenernos en equilibrio. Para cuidar de ella es imprescindible el conocimiento. Encuentra en Lo más saludable, todas las lecturas más útiles para tu día a día. Es el momento de un cambio positivo.